Si es usted lector de BibliaProbablemente haya oído hablar de Marcos 7. Este capítulo es uno de los más conocidos y estudiados de la Reserve Contiene una serie de enseñanzas y debates importantes. Si aún no has leído Marcos 7, éste es un buen momento para empezar a leer y aprender más sobre el mensaje que contiene. Jesús Cristo traído al mundo.
El capítulo comienza con una discusión sobre la tradición judía de lavarse las manos antes de comer. Los fariseos y los maestros de la ley preguntan a Jesús por qué sus discípulos no siguen esta tradición. Jesús responde que la tradición de los hombres no es lo mismo que la Palabra de Dios, y que lo que contamina a un hombre no es lo que entra en su boca, sino lo que sale de ella. Este mensaje es importante porque muestra que religión no debe basarse únicamente en rituales y tradiciones, sino en el verdadero culto a Dios.
En Marcos 7, Jesús también habla de la importancia de la pureza interior, en contraste con la preocupación de los fariseos por la pureza exterior. Enseña que lo que sale del corazón del hombre es lo que le hace impuro, no lo que come o toca. Esta enseñanza es fundamental para comprender el mensaje de Jesús, que se centra en la importancia de fede bondad y amor al prójimo.
Enfrentamiento con los fariseos y escribas
En este capítulo, verás que Jesús se enfrenta a los fariseos y escribas por sus tradiciones humanas, que valoraban más que los mandamientos divinos. Esto muestra cómo la religión puede convertirse en una cuestión de rituales y formalidades, en lugar de una cuestión del corazón y de obediencia a Dios.
Tradiciones humanas frente a mandamientos divinos
Jesús inicia la discusión con los fariseos y escribas, que criticaban a sus discípulos por no lavarse las manos antes de comer. Jesús les responde que se preocupaban más por sus tradiciones humanas que por los mandamientos divinos. Cita el profeta Isaíasque dijo: "Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí" (Mc 7,6; Is 29,13).
Jesús explica que no es lo que entra en la boca lo que contamina al hombre, sino lo que sale de la boca, porque es lo que sale del corazón lo que contamina al hombre. Enumera los pecados que salen del corazón: adulterio, fornicación, homicidio, robo, avaricia, maldad, engaño, lascivia, envidia, blasfemia y soberbia (Mc 7,20-23).
Corbán y honrar a los padres
Jesús también critica a los fariseos y escribas por permitir que la gente anule la palabra de Dios con sus tradiciones. Cita el ejemplo del corbán, un voto que alguien hace para dedicar algo a Dios. Los fariseos permitían que la gente anulara su obligación de honrar a sus padres diciendo que lo que habían dedicado a Dios era más importante. Jesús llama a esto hipocresía y dice que han anulado la palabra de Dios por sus tradiciones (Marcos 7:9-13).
En resumen, este capítulo muestra cómo las tradiciones humanas pueden llegar a ser más importantes que los mandamientos de Dios. Jesús nos enseña que debemos obedecer a Dios de todo corazón y no permitir que nuestras tradiciones nos alejen de Él.
La cuestión de la pureza
Cuando los fariseos y los maestros de la ley vieron que algunos de los discípulos de Jesús comían con las manos impuras, criticaron las prácticas de purificación de los discípulos (Marcos 7:1-2). Su crítica fue una oportunidad para que Jesús explicara el verdadero significado de la impureza.
Crítica a las prácticas de depuración
Los fariseos y los maestros de la ley criticaban a los discípulos de Jesús por no lavarse las manos antes de comer. Creían que la impureza era una cuestión externa que podía eliminarse mediante ceremonias de lavado y otras prácticas de purificación. Sin embargo, Jesús criticó este enfoque, argumentando que la impureza proviene del corazón y no del exterior (Marcos 7:14-15). Decía que las prácticas de purificación no tienen ningún valor real si no van acompañadas de un cambio de corazón.
El verdadero significado de la impureza
Jesús explicó que la impureza no proviene de cosas externas como la comida o las manos sucias, sino de los malos pensamientos y acciones. Dijo que lo que sale del corazón es lo que hace impura a una persona, incluyendo cosas como la inmoralidad sexual, el robo, el asesinato, el adulterio, la avaricia, la malicia, el engaño, la frivolidad, la envidia, la calumnia, la arrogancia y la insensatez (Marcos 7:20-23).
Jesús estaba enseñando que la verdadera pureza viene de dentro, del corazón, y no se puede conseguir mediante prácticas externas de purificación. Criticaba a los fariseos y a los maestros de la ley por centrarse en las prácticas externas y descuidar la importancia de un cambio de corazón.
Enseñar mediante parábolas y milagros
Jesús utilizó parábolas y milagros para enseñar a la gente el Reino de Dios. En Marcos 7, encontramos dos ejemplos de estas enseñanzas.
La mujer sirofenicia y la fe
En Marcos 7:24-30, Jesús se encuentra en Tiro y Sidón, en la región siria de Fenicia. Una mujer de esa región se acerca a Jesús y le pide que expulse de su hija un espíritu inmundo. Jesús le responde que no está bien quitarles el pan a los niños y echárselo a los perros. La mujer, sin embargo, replica que incluso los perritos comen las migajas que caen de la mesa de sus amos. Impresionado por la fe de la mujer, Jesús expulsa al espíritu impuro de su hija.
La curación del sordomudo
En Marcos 7:31-37, Jesús se encuentra en la región de Decápolis, a orillas del mar de Galilea. Llevan a Jesús a un hombre sordo y mudo para que lo cure. Jesús le mete los dedos en los oídos, le escupe y le toca la lengua. Luego mira al cielo, suspira y dice "Ephphatha", que significa "Ábrete". Inmediatamente, los oídos del hombre se abren y su lengua sale. La gente, maravillada, dice que Jesús lo ha hecho todo perfectamente.
Estas enseñanzas de Jesús muestran que la fe y la confianza en Dios son fundamentales para recibir sus bendiciones. Además, demuestran el poder de Jesús sobre todos los espíritus inmundos y las enfermedades.